domingo, marzo 29, 2009

The good-enough mother

Mi madre está de visita en casa. Cuando pasan los 4 días de convivencia la cosa se va poniendo cada vez más espesa. And I'm not a morning person.

Madre: Te hice café con leche.
Ushka: Ah, gracias.
Madre: No sé si le ponés azúcar o edulcorante.
Ushka: Mamá, ¿no te acordás? Desde los 12 años que lo tomo amargo.
MAdre: Bueno, che! yo qué sé. Además, vos te fuiste de casa a los 15. Hace mucho que no vivimos juntas.
Ushka: ¿QUÉ? ¿Estás delirando? Yo nunca me fui de casa a los 15. ¿De dónde sacaste eso?
Madre: A los 15 te fuiste de intercambio un año, volviste y después te fuiste a estudiar a Buenos Aires.
Ushka: Primero, no me fui a los 15, me fui a los 16.
Madre: Hacía un mes que habías cumplido los 16.
Ushka: ¿Y vos te acordás por qué me fui ese año? Me dijiste: "Presentate este año a rendir el examen de cultura general, porque seguro que no lo vas a aprobar, pero por lo menos ya sabés de que se trata y lo rendís el año que viene de nuevo".
Madre: Sí, nunca pensé que fueras a aprobar.
Ushka: Segundo, no volví y me fui. Volví y estuve todo un año viviendo acá. ¿Te acordás?
Madre: Ese año es como si no hubieras estado... tenías un carácter.
Ushka: Sí, no sé por qué. EL shock de volver, sumado a que se había muerto mi amigo y me enteré cuando volví, además del hecho de que no me querían reconocer el año que hice allá y tuve que rendir cuarto año libre y dar 15 materias en un mes tal vez hayan hecho un poco de mella en mi buen humor. Pero te juro que viví en tu casa por todo un año.
Madre: Y ni bien terminaste te viniste para acá. Además al principio ibas más seguido, después no quisiste ir más.
Ushka: Me pregunto por qué.
Madre: Porque no querías vernos a nosotros.
Ushka: Eso o tal vez no tenía plata para el pasaje.
Madre: Yo te lo pagaba.
Ushka: Tal vez trabajaba y sólo tenía 15 días que prefería aprovechar en otro lado.
Madre: En otro lado... para no vernos.
Ushka: No voy a ganar nunca esta discusión, ¿no?
Madre: No estamos discutiendo. Estamos tomando un café y charlando.
Ushka: Para mí una charla incluye cremas anticelulitis y baños de crema para el pelo.
Madre: ¿Y hace cuanto no te haces un baño de crema?
Ushka: Una semana.
MAdre: Parece un año. ¿Por qué no hacés algo con tu pelo?
Ushka: Dios! Si me pongo a estudiar medicina como vos querías, ¿vas a dejar de criticarme? Te juro que prefiero matarme 6 años más en la facu si nos va a ahorrar estas conversaciones.
Madre: No te preocupes, mañana ya me voy. La próxima me voy a una hotel.

Acto seguido se levanta tira la taza con café y todo en la pileta y se va pegando un portazo.

El día que se me ocurra tener un hijo someone shoot me at the back of my neck.

viernes, marzo 20, 2009

Mind truco

Mi madre me adora. Eso yo lo sé. Pero cada tanto, como toda madre, se le da por hacerme sentir mal porque soy diferente de como ella me había planeado (casi una desilusión). A veces lo consigue. Otras veces le canto retruco y cuando ella dice "quiero vale 4" la miro directo a los ojos, levanto la laringe para agravar la voz y le digo "quiero".

En medio de una charla que venía de hace varios minutos ya con la intención de:


Madre: Bueno a lo mejor Doña Olga tiene razón. A lo mejor tenía cierta tendencia homo -ella cree que es re moderna por decirlo así- y vos nunca te diste cuenta. (ENVIDO)
Ushka: Oy Vey!, aquí vamos.
Madre: Qué?
Ushka: Vos y tu manera de ver mi vida.
Madre: Yo no digo nada de tu vida. ¿No dijiste que Doña Olga lo dijo?
Ushka: Te juro que hoy no es el día. Esto puede terminar muy mal.(No quiero)
Madre (y su frase de cabecera): Con vos no se puede hablar. No se te puede decir nada.
Ushka: ¿Y si ya lo sabés por qué seguís intentándolo?
Madre: Porque soy tu madre. ¿No puedo charlar con mi hija acaso?
Ushka: Ok, de acuerdo. ¿De qué querés charlar?
Madre: Nada, ahora dejá. Sólo que a lo mejor era así, a lo mejor se fue con otro hombre.
Ushka: Sí, puede ser.
Madre: Claro.
Ushka: Síp.
MAdre: Yo no sé cómo no te da cosa pensar que estuviste con un...un... (TRUCO)
Ushka: ¿Puto?
Madre: Sí, no sé.
Ushka: No sería la primera vez. (QUIERO RETRUCO)
Madre (sorprendida): ¿Eh? ¿Cómo?
Ushka: Una vez me besó un puto.
Madre: ¿Cómo que te besó un puto?
Ushka: Sí, puto re puto. Puto de camino por Santa Fe y Callao escuchando Barabara Streisand y Minelli en mi MP3.
MAdre: ¿Y por qué te besó?
Ushka: Porque me dijo que era hermosa y que había bailado con una sensualidad y un erotismo digno de diva.
Madre: ¿árabe? (QUIERO VALE 4)
Ushka: No tenía pinta de árabe. Parecía más bien gringo.
Madre: NOO, si habías bailado danza árabe.
UShka: No. Había hecho un strip-tease.
Madre: ¿QUÉEE? ¿Cómo que hiciste un strip-tease? eso es mentira.
Ushka: Un strip-tease, me saqué la ropa y fui por full monty. (QUIERO)
Madre: ¿En dónde?
Ushka: En la fiesta de una bailarina que me pidió que lo haga.
Madre: No (y sacude la cabeza con una incredulidad que le empezaba a desfigurar la cara).
Ushka: Igual no te preocupes, tenía 21, era mayor de edad.
Madre: Na, na, na (sigue sacudiendo la cabeza). Me estás gastando. ¿De verdad hiciste eso? (¿Qué cartas tenías)

Y entonces, por esta vez, sólo por ahora, bajo las cartas sin mostrarlas. Las mezclo con el resto del mazo y le digo:

Ushka: Ahora nunca lo sabrás.

viernes, marzo 13, 2009

El ascetismo de los gimnasios

Luego de 6 largos meses he vuelto al gimnasio. Sí, decidí que ya era tiempo de retomar la lucha y dar un poco de pelea (hago tae-bo y fight-do).
Cuando entro al gimnasio -y esto me sucede cada vez, no ahora porque ha pasado tanto tiempo- me sorprende encontrarme con gente que se siente como en casa, esa gente que disfruta del esfuerzo y que está convencida del "no pain no gain", que cuando el profe dice agarren mancuernas de 1kg agarran de 2kg. Gente con poca lucidez para los números, pero que manejan al dedillo las calorías. Gente muy entrenada físicamente, pero no les pidan que cabeceen (léase, que usen la cabeza).
Me sorprende cómo este muchacho, el profe, viene desde hace 5 años a dar 3 clases al día y parece como si estuviera dando la primer clase de su vida. Tiene las comisuras de los labios engrampadas en las orejas.
Yo le llamo el ascetismo de los gimnasios.

Profe: Hola! tanto tiempo! ¿qué te pasó que no venías?
Ushka: No pude, estaba recuperándome.
Profe: ¿Te quebraste, por eso que no viniste tantos meses?
Ushka: Algo así.
Profe: ¿Un desgarro?
Ushka: Esa descripción se acerca más.
Profe: ¿Y ya estás recuperada 100%?
Ushka: Ya estoy muy bien, pero no sé si uno se recupera 100% de un desgarro. Como que te queda miedo de volver a desgarrarte, no?
Profe: Pero sí! vas a ver que ahora te vas a poner entrenada de nuevo. ¿Empezamos?

Pone esa la típica música de aeróbica, que son temas ochentosos y noventosos pero a velocidad triplicada y con una base de tum-tum-tumtumtum que te retumba por todos lados. Ah! y la pistolita de rayos laser. Que alguien me explique la pistolita de rayos laser que suena chiu-chiu cada tanto en medio de la canción. Empezó la clase:

jab-jab-cross patada
uppercut (der)-uppercut (izq)-peek a boo-patada lateral
jab-crochet-patada atrás
cross-uppercut- bloqueo

La clase se iba acelerando, a los 10 minutos yo traspiraba como si estuviera estivando bolsas de cemento en el puerto de Asunción del Paraguay en pleno mediodía de Enero. El aire, sin embargo, parecía que me faltaba como cuando estuve en Mendoza en el Cristo redentor a 3800 m.s.n.m. Cuando la clase terminó se acerca el profe y "las chicas" que siempre le coquetean.

Profe: ¿Y? Veo que pudiste seguir bastante bien la clase.
Ushka: Maso, seguramente mañana no pueda moverme. Me va a doler todo.
Profe: Bueno, pero si te duele es porque estuviste trabajando los músculos. Eso es bueno.
Ushka: No, eso no es bueno. En mi mundo, si querés darme ánimo decime que todo esto quema calorías. O incluso, si eso es una gran mentira, motivame haciéndome creer que alguna vez voy a poder pelear cuerpo a cuerpo con Angelina Jolie vestida de Tomb Raider o Keanu Reeves en Matrix, cualquiera de ellos me da lo mismo. Pero nunca me digas que si duele es bueno. No soy una asceta.
Profe: ¿UNA QUÉ?
Ushka: Una asceta.
Profe: ¿Qué es eso?
Y salta una que, impostando el tono de voz para marcar alguna diferencia y como diciendo "no soy sólo un cuero bien entrenado" les dice a todos:
Señora: Una seta, un hongo. Lo que te quiere decir es que ella no es como un hongo al que nada le duele.-Y la señora me mira como diciendo, "les tuve que explicar a estos bestias".
Profe: AAAhhhh!
Resto de las Chicas: Ahh jajaja.
Ushka: ...
Señora: ¿No cierto?
Dudé. Dudé si debía explicar y romper aquella precaria ilusión de entendimiento. Dudé durante todo el instante que lleva tomar un sorbo de agua, inspirar profundo y soltar el aire contestando:
Ushka: Yo no lo podría haber explicado mejor.

Oh, the humanity!

sábado, marzo 07, 2009

Day tripper

Yendo a Comodoro, en micro. 24 horas non-stop. 24 largas horas que parecen 48 cuando vas sin mate. Así que, la estrategia es la misma que los fumadores. Si sos hombre, te acercás a la cabina de los choferes, para hablar de fútbol y prender un cigarrillo. Si sos mujer, sólo tenés que sonreírle amablemente al asistente de abordo y decir "aca no sirven mate?" y enseguida te invitan a la cabina.

Bajo y los choferes estaban escuchando cumbia.

Ushka: Hola, me dijeron que acá servían unos buenos mates.
Chofer 1 (el que maneja): Pero como no! Che, cambia esa música y poné otra cosa!

El chofer 2 se apresura a sacar el CD de cumbia y en un intento de crear una atmósfera que resulte más confortable no se le ocurre mejor idea que preguntar:

Chofer 2: ¿Alejandro Sanz te gusta?
Ushka: Dios, no, deberían extirparle las cuerdas vocales y hacerle un gran favor a la humanidad.
Asistente: Poné el de Luismi, ese le gusta a todas las chicas.
Ushka: Realmente sólo venía por un par de mates, pero si quieren me voy.
Chofer 1 y 2: NOOO!!! Ponemos otra cosa.
Asistente: ¿Tampoco te gusta Luismi?
Ushka: Eeee, insisito, no tienen que preocuparse por la música.

Mientras yo tomaba los mates, lo intentaron todo: Chayanne, Axel, Juanes, Shakira. Al paso que iban era mejor la cumbia.

Ushka: Bueno, les agradezco los mates. Me vuelvo a mi asiento.
Chofer 1: Ya?
Ushka: Ya.
Chofer 2: Pero, qué lástima!
Chofer 1: Bueno, después si querés vení más tarde.
Ushka: Calculo que más tarde voy a estar durmiendo.
Chofer 1: Bueno, pero si no te podés dormir venite a tomar unos mates, total acá siempre hay uno despierto... a veces es el que maneja.
UShka:...
Chofer 1: Ja!
Chofer 2: Jejeje
Ushka: ...
Chofer 1: ¿Lo entendiste? siempre hay uno despierto, a veces es el que maneja.
Ushka: ¿Puede mirar a la ruta? Sí, claro que lo entendí, pero no es gracioso. Me asusta.
Chofer 2: Peeerrrooo ya la hiciste poner mal a la chica.
Ushka: No, la chica no se puso mal, la chica entró en pánico.

Fui a mi asiento y pese a que tomé un whisky después de la cena no pude pegar un ojo en toda la noche. Nunca una ensalada rusa me había caído tan mal. Al llegar a Comodoro.

Madre: ¿Qué tal el viaje?
Ushka: Mal. Escucha esto y escuchame bien: cuando viajes en micro, pedite el whisky directamente, te va a caer me jor que los mates.
Madre: ¿Estuviste tomando en el micro?
Ushka: Dicho así parece que fuera una alcohólica perdida, pero realmente no me quedaba otra.

Mi madre pone cara de tragedia, se llenan los ojos de lágrimas cual animé japonés y mueve la cabeza de un lado a otro.

Ushka: Oh, Dios! lo que me faltaba. Creo que me están volviendo las ganas de apostar mi vida en el micro de vuelta y seguir escuchando Alejandro Sanz bajo riesgo de choque frontal.