viernes, noviembre 24, 2006

Opinión profesional

Viernes temprano por la mañana. Yo estoy estudiando para mis últimos dos finales para recibirme de psicóloga. Llama mi madre.

Madre: Hola hija, qué hacías?
Ushka: Estudiando.
Madre: Ah, que bien! Sabés por qué te llamo?
Ushka: Es una adivinanza?
Madre: No, boba, porque quería saber cuál es tu opinión profesional, porque el otro día estaba en la peluquería y había una de estas revistas boludas y me puse a leer un artículo sobre el Síndrome de Déficit Atencional y por las cosas que decía, a mí me parece que tu hermano tiene ADD (nombre técnico del síndrome). No sé, a mí megustaría que vos me dijeras, porque así uno sabe qué hacer, cómo ayudar.
Ushka: No creo, ma, el ADD es un diagnóstico para niños y adolescentes.
Madre: Bueno, pero yo después vine a casa y me puse a buscar en internet más información y hay un Trastorno de Déficit Atencional que se da en adultos. Yo le di el artículo a la novia de tu hermano para que lo leyera, y también se lo di a tu papá para que él lo lea y me diga si le parece que tu hermano tiene ADD.
Ushka: Bueno, mirá, es complicado porque en realidad yo no estoy muy de acuerdo ideológicamente con esas teorías. En general, son "Diagnósticos bolsa", entra cualquiera ahí, y después te quieren vender la droga que lo cura.
Madre: Bueno, pero si leés el artículo vas a ver que tiene como 50 ítems a partir de los cuales podés saber si la persona tiene o no déficit atencional.
Ushka: Y claro, de 50 seguro algunos va a tener!
Madre: Bueno, pero yo se lo di a tu padre para que lo leyera. Así que si él te pregunta tu opinión, no le digas esto a él porque él te va a escuchar a vos y no va a tener una opinión por sí mismo.
Ushka: Vos me pediste opinión y te la di, si él me la pide se la voy a dar.
Madre: No, no, porque si no va a estar repitiendo lo que vos decís. Mirá, yo te mando el artículo de internet y leelo y decime que te parece. Vos leelo.
Ushka: Bueno, ma, tengo que seguir estudiando.
Madre: Bueno, chau, ahora te lo mando, eh?

Días más tarde en el consultorio de mi analista, recostada en el diván y tras un largo silencio en el que se me cruzaban por la cabeza frases como: "tu opinión profesional"... "artículo en revista boluda"... "no le des tu opinión a tu padre", rompo el silencio y digo:

"Tengo algo así como una sensación, no sé, pero creo que, tal vez, mi madre no me valora como profesional, pero no sé de dónde viene"

domingo, noviembre 12, 2006

Mal día

Era viernes, estaba agotada de estar toda la semana trabajando, estudiando, cursando. Salí de 9 horas de trabajo intenso habiendo ingerido sólo un yogurt con cereales. Esperé el bondi durante 15 minutos y cuando llegó estaba repleto de gente. Me hubiera tomado un taxi, pero no había cobrado y sólo tenía 2 pesos.
De a poco y con muchisima precaución para no quedar embarazada, me fui moviendo hasta la puerta trasera. De pronto una vieja de estas que salen a tomar el té con las amigas en horas pico, me apretuja contra el caño y por un agudísimo sentido de la percepción que tengo, me di cuenta que el estuche de los anteojos que tenía dentro de la cartera era rígido, mejor dicho, más rígido que mis riñones.
Vieja: ¿Bajás?
Yo giro la cabeza, la miro con un solo ojo y afirmo ligeramente con la cabeza, mientras suspiro lo suficientemente fuerte como para que le llegue mi aliento a estómago vacío.
La vieja, que no me vio, siguió apretujándome. Y entonces, me dice:
Vieja: ¿Me tocás, por favor?
Ushka: No, señora, sólo porque soy fea, tengo puesta una camisa, jeans y zapatillas no significa que sea lesbiana. (y se lo dije bien cerca de la cara, cosa que le llegue mi aliento a hígado sin vida).
Vieja: Si tocás el timbre, nena. (y lo dice fuerte para llamar la atención sobre el escándalo que pensaba armar.)
Entonces, yo estiré mi mano en cámara lenta, cual película de suspenso, y sin dejar de mirarla con el ojo, toqué el timbre.
Mientras bajaba, escuché atrás mío:
Vieja: Qué estúpida!
Ushka: Puede ser, pero yo no ando de levante en los bondis a los 70.

Todos podemos tener un mal día, pero muy pocos quedamos tan resentidos.

jueves, noviembre 02, 2006

Sólo para nostálgicos

Una vez que ustedes han visto el Cristo de San Javier, bajan la escalera lo más rápido posible, espantados con la idea de un gigantesco proctólogo se le ocurra despegar sus pies de la tierra, al estilo el monstruo de los Ghostbusters, y se pasee por toda la ciudad buscando algún voluntario.
Bien, decía, bajan la escalera y justo a la derecha hay un kiosko. Vende, por supuesto, alfeñiques, gaseosa... pero si miran cuidadosamente, están colgadas a un costado...
Sí, amigos, las gallinitas. Imposible no comprarlas, quien no quiere acordarse de ese gusto azucarado altamente empalagoso??? Yo las comía de niña (cuando todavía no era vegetariana), es más creo que están ahí desde la primera vez que fui a Tucumán... sí, sí, las mismas.
Por eso, para quienes temen al proctólogo de San Javier, para ustedes, nostálgicos... allí les va.

EUREKA!!!



Arte subjetivo

En San Miguel de Tucumán está el monte de yungas. Una verdadera belleza. Estuve allí hace poco tiempo e hice una excursión. Y justo allí, en el medio del monte hay un lugar llamado San Javier.
San Javier se caracteriza por tener una especie de cristo redentor, pero con un a posición poco feliz, a mi gusto. Erguido en medio del monte, mirando hacia San Miguel está el cristo con la mano izquierda colgando a un lado, pero con la palma hacia el frente y con forma cóncava, mientras la otra mano está en alto, pero solamente con los dedos índice y mayor estirados.
Dicen que está bendiciendo a la ciudad... yo lo ví y no pude evitar recordar la anécdota del gordo Gutierrez cuando fue al proctólogo: "Venga mi amigo... tranquilo que solamente lo voy a revisar"
Juzguen por ustedes mismos...